domingo, 18 de octubre de 2009

¿Duendes?

Este es un diálogo ficticio publicado en el blog "The Atheist Experience". Me gustó mucho porque es una situación bastante común y en esta historia aparece muy bien representada. Además no encontré ninguna traducción al español en la web así que me tomé la libertad de traducirla. Es un poco larga pero entretenida. Aquí va:

___________________________________________________________________________________



¿Duendes?



Una caja de aspecto firme yace sobre una mesa mientras dos hombres se acercan a ella...


Creyente: En esa caja hay un duende.


Ateo: Mmmm... no lo creo... ¿por qué tú sí?


Creyente: Lo escuché hablar.


Ateo: Tampoco creo eso... de hecho, no tengo evidencia de que los duendes existan.


Creyente: Bueno, o hay un duende en esa caja o no lo hay, cierto?


Ateo: Claro.


Creyente: Entonces es 50/50... y como lo escuché hablar, estoy seguro de que hay un duende ahí dentro.


Ateo: O hay un duende en la caja o no lo hay, pero eso no significa que las probabilidades sean 50/50.


Creyente: Claro que si.


Ateo: En realidad no, pero ¿puedes ofrecer alguna evide...


Creyente: ¡Espera! ¡me acaba de decir que si no crees que él está ahí, te encadenará a un árbol cuando mueras y te clavará su bastón por atrás por 10.000 años!


Ateo: Mmm, wow, pero te preguntaba si puedes ofrecer algo de evidencia adicional aparte de tu afirmación de que lo escuchaste. Yo no lo escuché decir eso en todo caso.


Creyente: Bueno, no estás escuchando lo suficiente.


Ateo: OK (escucha)... nad...


Creyente: ¡Dale TIEMPO! Tienes que QUERER escucharlo sinceramente...


Ateo: Si realmente está ahí, me gustaría saberlo... seguiré escuchando.


Creyente: ¿Escuchaste eso?


Ateo: No, nada.


Creyente: O estás mintiendo o eres tan cerrado de mente que él no te deja escucharlo.


Ateo: ¿No me deja? ¿Los duendes pueden escoger quien los puede escuchar?


Creyente: ¡Claro! Él podría abrir la tapa, mostrarse para mi... y tú nunca lo sabrías, pensarías que la caja estuvo cerrada todo el tiempo. ¡Es MÁGICO!


Ateo: Bueno, ¿tienes evidencia de alguna de esas cosas?. O sea, nunca he visto un duende... no tengo ninguna razón para creer que siquiera existan y cada vez que me dices como probarlo, las pruebas fallan.


Creyente: No, TÚ fallas. Funcionó para mi.


Ateo: (Moviéndose hacia un puñado de gente en un lado) Bueno, aquí hay otras personas que lo han intentado... y no les funcionó.


Creyente: Sí, pero éstas personas (moviéndose hacia un enorme grupo de gente en otro lado) lo escuchó. De hecho, hay MUCHA más gente aquí que te dirán que lo oyeron.


(El Ateo les hace unas cuantas preguntas)


Ateo: Hablé con algunos de ellos... todos tienen un enfoque algo distinto sobre esto. Algunos dicen que es un duende, otros que es un hada, otros que es un enano. No escuchan la misma voz y parecen recibir mensajes conflictivos desde dentro de la caja. La mayoría simplemente dijo que conocía a alguien que sabía lo que hay en la caja.


Creyente: ¡Ah, sí! En realidad hay un troll en la caja con el duende. A veces se hace pasar por el duende, o un hada, o, un enano para engañar a esa otra gente, pero notarás que de todas maneras escuchan algo.


Ateo: Sí, algunos dicen eso, pero otros no.


Creyente: Bueno, a veces el troll bloquea el sonido para que la gente no pueda escucharlo.


Ateo: Entonces, ¿cómo sabes que no estás escuchando al troll cuando escuchas al duende?


Creyente: ¡No seas absurdo! El duende es mi amigo, él se asegura de que yo sólo lo escuche a él.


Ateo: Pero ¿cómo puedes estar seguro? si crees que ahí hay un troll también, que se hace pasar por el duende... ¿cómo puedes saber? Tal vez está SOLAMENTE el troll y está jugando contigo.


Creyente: Ahora te estás poniendo denso. Mira, hay una caja, ¿verdad?


Ateo: Sí.


Creyente: Ahora, ¿para qué existiría una caja si no es para tener algo dentro? TIENE que haber algo dentro, ¿cierto?


Ateo: No, la caja podría estar vacía.


Creyente: ¡No, no puede, o no habría razón para que la caja existiera! Las cajas son para contener cosas. Cualquiera sabe eso.


Ateo: Entonces ¿estás diciendo que la caja NO PUEDE estar vacía?


Creyente: Correcto.


Ateo: ¿Y no crees que esa es una premisa falsa?


Creyente: No, y se confirma con el hecho de que escuché a un duende.


Ateo: ¿Cómo lo escuchaste?


Creyente: Me habla telepáticamente.


Ateo: Oh, ¿entonces no quisiste decir "escuchar con mis oídos", sino "escuchar con mi mente"?


Creyente: Tu corazón.


Ateo: El corazón no escucha...


Creyente: ¡Tu corazón metafórico!


Ateo: OK... pero ese tipo dice que lo escuchó con sus oídos.


Creyente: Está equivocado... está escuchando al troll.


Ateo: Pero yo ni siquiera escucho al troll.


Creyente: Te está bloqueando.


Ateo: OK... ¿cómo sabes todo eso?


Creyente: El duende me lo dijo.


Ateo: OK, entonces, has aludido a la magia, telepatía, duendes, trolls y cajas no-vacías... y no me has ofrecido ninguna evidencia. Lo siento pero no te creo.


Creyente: ¡No olvides el bastón!


Ateo: Cierto... y amenazas con cosas que pasarán despues de que me muera, cuando no hay ninguna evidencia de que haya un "yo" al que le pasen cosas después de mi muerte. Simplemente no creo tu afirmación.


Creyente: ¿Y si te equivocas? ¿No es un riesgo muy grande? Él dice que tiene una olla con oro para ti si crees... ¿no vale la pena creer?


Ateo: Mira, incluso si yo mismo pudiera obligarme a creer, cosa que no puedo, ¿por qué querría hacer eso? Si no hay duende, entonces desperdicié la oportunidad de averiguar qué hay realmente en la caja. Y si él quiere que siga sus instrucciones...


Creyente: Oh, claro que quiere eso... las escribí para ti. Toma...


Ateo: (Mirando la lista)... entonces desperdicié mi vida haciendo cosas que... ¿¿dice "No comer caca"??


Creyente: Sí... gran regla, ¿verdad?


Ateo: Sí... pero ¿y ésta? "Pon tu dinero en la caja"


Creyente: Él tiene necesidades también... las ollas con oro no crecen en los árboles.


Ateo: Pensé que él era mágico.


Creyente: Lo es... pero, bueno, el dinero es para que podamos contarle a la gente lo que el duende quiere.


Ateo: ¿Por qué no se lo dice él?


Creyente: Podría, pero... bueno, lo hará, si están preparados. Algunos, como tu, son engañados por el troll.


Ateo: ¿Por qué no se deshace del troll?


Creyente: Es un misterio, pero estamos seguros de que lo hará algún día.


Ateo: Como sea, si esto no es verdad, habré desperdiciado mucho tiempo y dinero en algo falso... sólo para evitar un peligro que no era real.


Creyente: Sí... pero ¿y si te equivocas?


Ateo: OK... mira, es suficiente. NO creo que haya un duende en la caja.


Creyente: ¿Cómo puedes estar seguro?


Ateo: No lo estoy, pero no creo que esté ahí.


Creyente: ¡Cómo puedes decir que no hay un duende en la caja!


Ateo: No... dije que no creo que exista un duende.


Creyente: Es lo mismo.


Ateo: No lo es... sin embargo, ahora que he considerado y rechazado tu afirmación...


Creyente: ¡No lo hagas!


Ateo: ... estoy dispuesto a decir que efectivamente creo que no hay un duende en esa caja.


Creyente: ¡NO! Estás haciendo una afirmación irracional... ¿¡¿¡Crees que lo sabes todo!?!?


Ateo: No, no estoy diciendo que tenga certeza absoluta de que no hay un duende en la caja... pero sí creo con un nivel de certeza que no lo hay... porque si lo hubiera, esperaría algún tipo de evidencia que lo apoye, y las investigaciones siguen sin producir nada. Volveré con algunas herramientas... vamos a abrir esa caja.


Creyente: No puedes abrir la caja.


Ateo: ¿Por qué no?


Creyente: Porque no puedes, es imposible.


(Otra persona se acerca)


Agnóstico: Él está en lo correcto. Ninguno de ustedes sabe lo que hay en la caja. Los dos son igualmente absurdos al asegurar que sí lo saben.


Ateo: Yo no aseguré que estoy absolutamente seguro, sólo dije cuál es mi creencia, y está basada en la evidencia, o la falta de ella.


Agnóstico: No seas tonto... eres tan dogmático como él.


Ateo: No soy para nada dogmático sobre esto, sólo me gustaría abrir la caja y averiguar.


Agnóstico: La caja es impenetrable.


Ateo: ¿Cómo lo sabes?


Agnóstico: Mmm, bueno, no lo sé... pero parece impenetrable.


Ateo: ¿Ah sí? ¿Conoces alguna otra cosa impenetrable para compararla?


Agnóstico: Bueno, no... pero estoy seguro de que es impenetrable.


Ateo: Si me perdonas, estamos del mismo lado, los dos rechazamos su afirmación...


Agnóstico: Yo no la rechazo, yo no rechazo nada.


Ateo: ¿Aceptas su afirmación?


Agnóstico: No lo sé.


Ateo: ¿No sabes si aceptas su afirmación?


Agnóstico: No, quiero decir que no sé si está en lo correcto o no.


Ateo: Bueno, yo tampoco, pero eso no es lo que pregunté.


Agnóstico: La caja es impenetrable.


Ateo: Bueno, pareces tan dogmático acerca de nuestra incapacidad de conocer, como él lo es sobre sus comunicaciones privadas con el duende.


Agnóstico: Ahora estás siendo hostil.


Ateo: Mira, voy a abrir esta caja.


Agnóstico: Tonto Ateo...


(El Ateo logra taladrar un pequeño agujero en la caja)


Ateo: ¡Mira, no es impenetrable! Le hice un agujero aquí. Eventualmente podríamos ser capaces de investigar esto con más detalle.


Creyente: ¡Cambiaste la caja!


Ateo: No, ésta es la caja.


Agnóstico: TODAVÍA es impenetrable, tu pequeño agujero no te da información suficiente para respaldar tu afirmación.


Ateo: Puedo seguir investigando... y hasta ahora, no hay información para apoyar las afirmaciones del Creyente.


Creyente: ¡Cambiaste la caja!


Ateo: No lo hice.


Creyente: Emtonces, um... se está escondiendo. Él necesita que creas en él sin verlo, así que se está escondiendo.


Ateo: Eso no tiene sentido.


Creyente: El troll ha creado la ilusión de un agujero que te provee falsa información sobre lo que hay en la caja.


Ateo: (suspiro)


Agnóstico: Eso podría ser posible, realmente no podría decir.


Ateo: No, claro que no podrías...